Edgar Oceransky: 50 años de estar aquí
Gabo, hermano…
Acabo de leer «Edgar Oceransky: 50 años de estar aquí» y sinceramente me has dejado sin palabras. Esta no es una reseña, es una carta de amistad, un testimonio de años compartidos que me conmovió hasta las lágrimas.
Revivir contigo esos recuerdos de La Planta de Luz, las transmisiones de radio desde Zona Acústica, y especialmente esa época artesanal en que ibas a MixUp a comprar mis discos para que los firmara y luego los vendían en su página… ¡Qué hermosos tiempos! Pensar que en algún rincón del país alguien todavía conserva uno de esos discos autografiados me llena de una nostalgia muy dulce.
Me emocionó profundamente cuando escribes que soy «un contador de historias» y que mis canciones «acompañan». Esa siempre ha sido mi intención: estar ahí, en esos momentos donde las palabras no alcanzan pero una canción sí puede llegar.
Tu reflexión sobre mis 50 años me hizo pensar en todo el camino recorrido, en todas las personas como tú que han estado ahí desde el principio, construyendo comunidad, como tan bellamente lo describes. Sin ustedes, nada de esto tendría sentido.
Esta no es solo una invitación a un concierto – es un abrazo de décadas convertido en palabras. Gracias, Gabo, por estar, por recordar, por seguir ahí.
Con todo mi cariño y gratitud eterna, Edgar
P.D. El Teatro Fru Fru nos espera para celebrar juntos estos 50 años de estar aquí.