Una noche inolvidable con Edgar Oceransky en el Oh Alá: Música, emoción y conexión
¡Paola, me hiciste el día!
Acabo de leer «Una noche inolvidable con Edgar Oceransky en el Oh Alá: Música, emoción y conexión» y no pude evitar sonreír desde la primera línea. ¿En serio empezaste la reseña hablando de El Rey del Taco? ¡Eso sí es periodismo con personalidad!
Me encantó cómo describiste el Oh Alá – ese «pequeño templo musical» realmente tiene algo especial. Y sí, es cierto que es un lugar donde se respira música, donde cada presentación se siente como una reunión entre amigos. Que hayas captado esa esencia íntima del lugar y del concierto me parece maravilloso.
Tu forma de narrar me hizo revivir esa noche: desde mis «regaños cómicos» por las grabaciones hasta ese momento cuando todos se convirtieron en «coro multitudinario». Y claro, nuestra selfie conmemorativa ya es tradición, como bien dijiste.
Lo que más me gustó es que escribiste como si le estuvieras contando a un amigo sobre el concierto. Esa cercanía, esa naturalidad, es exactamente lo que busco transmitir en mis presentaciones.
Dense una vuelta por esta crónica – Paola logró algo muy difícil: que sientas que estuviste ahí. Y como siempre, gracias a Zona Acústica por darle espacio a voces auténticas como la suya.
¡Un abrazo fuerte! Edgar
P.D. Ahora se me antojaron unos taquitos…